martes, 28 de abril de 2009

Efecto Rebote

Como muchos, ayer seguí parte del debate en el Congreso sobre las notas personales de la Congresista Hilaria Supa sacadas por el Diario Correo en su titular de portada (ayer este diario se agotó antes del medio día). Sin embargo, el día de hoy (viernes 24)al acercarme al puesto de periódicos vi con agrado el titular del diario La República, un titular en quechua, que además muestra que es posible para un quechuhablante reafirmarse en su condición y que esa posición hoy tiene un gran apoyo de la población y de varias personalidades del mundo político y académico.

Me sumo a los incontables comunicados de reproche al limitado (por decir lo menos) editorial del Sr. Mariategui que a decir verdad no hace mucho honor a su apellido. Sin embargo considero que a veces son necesarios estos extremos para generar respuestas aplastantes como la que quisiera comentar.

Ante la difusión de un punto de vista muy sesgado a nivel nacional y pese a la divida opinión pública, la respuesta ha sido clara y el mensaje contundente. El titular de hoy en la República no solo es la re-in vindicación de una congresista, de su lengua, o de la cultura de un pueblo milenario, sino que es la presencia de esta lengua, de esta cultura y de este pueblo en un escenario antes esquivo. Los medios de comunicación masiva son los que generan opinión pública, los que hacen el trabajo complementario al meramente legislativo o político y al que se realiza en las aulas; son el gran escenario para una auténtica revitalizació n lingüística (aunque también desinforman) . Hoy muchos maestros bilingües de zona quechua podrán usar este titular para reforzar el trabajo que realizan con sus estudiantes y consolidar el modelo educativo de la EIB que busca un equilibrio entre las dos lenguas más habladas en el país.

Me preguntaba hoy ¿Cuántos quechua hablantes habrán podido (aunque con una base de lecto escritura en castellano) deletrear el titular y comprender de primera mano el mensaje de la Sra. Supa? La respuesta me llenaba de optimismo. Sin embargo me hice otra pregunta ¿cuántos peruanos (monolingües) hemos tenido que leer hasta el final de la frase y llegar al paréntesis de la traducción para comprender este mensaje? ¿Es lícito y democrático para un país plurilingüe como el nuestro que tengamos un sistema que nos priva del derecho a conocer mejor nuestras lenguas, a entenderlas, a usarlas en nuestra vida cotidiana, a difundirlas y ampliar su uso?

Pero este titular y lo que genere me lleva a pensar que no debemos quedarnos sólo en la desaprobación de la posición del diario el Correo sino aprovechar el efecto rebote del Sr. Mariategui y sus apreciaciones clasistas y faltas de visión sobre la cultura, sobre el país y su desarrollo. Este “rebote” nos puede ayudar a promover y consolidar una demanda nacional a favor de la diversidad cultural y lingüística. Hilaria Supa con sus “notas” nos enfrenta a una doble demanda, una a favor de un sistema de educación bilingüe intercultural que garantice a los quechuhablantes el manejo de ambas lenguas para que se desenvuelvan en cualquier espacio social con la debida solvencia y seguridad. La otra demanda, no menos importante y más invisible y silenciosa, es la un pueblo que siempre tiene que hacer el esfuerzo de comprender al otro y el poco o nulo esfuerzo que hacemos los castellano hablantes para comprender una lengua que es parte de nuestra identidad cultural. Es la demanda de mayor equidad en las exigencias socio lingüísticas.

¿Algo está cambiando? Considero que nuestras congresistas bilingües están dando matices democráticos a un Congreso monocultural y le están garantizando un rostro más plural al país. Sin embargo es preciso seguir apuntalando el nivel de asesoramiento de estas representantes para que todos los intereses de los pueblos originarios del país que ellas representan se expresen en estos espacios. ¡Cuánta falta hace una presencia oficial de los pueblos indígenas amazónicos quienes a la fecha siguen en pie de lucha en contra de la ley de aguas que nos excluye de derechos fundamentales!

Finalmente, todos los ciudadanos tenemos derecho a ser informados adecuadamente y por ello felicito a La República por el titular de hoy que abre un espacio más plural. En este sentido aprovecho para compartir una parte del mensaje que envié hace algunos años a un diario de circulación local para proponerle que sea pionero en temas de diversidad cultural y ofrezca un espacio más plural lingüística y culturalmente.

Su diario es de circulación fundamentalmente en Lima y en esta ciudad se concentra la mayor población de quechuhablantes del país, concentra a la población bilingüe en lengua originaria más grande del continente y además hay hablantes de las lenguas mayoritarias del país: aimaras, aguarunas (awajun), shipibos, asháninkas. ¿No le parecería un aporte importante para la transformació n de este país que niega su diversidad, abrir en su diario un espacio para la expresión escrita de estas lenguas? No se trataría de textos largos, o de grandes titulares, sino de columnas de opinión, comentarios políticos y de información cultural. El impacto que está teniendo la publicidad de algunas empresas que han tomado esta iniciativa es interesante (publicidad de Claro en lenguas)...esta publicidad ha permitido que mucha gente por primera vez en su larga vida escuche alguna de las lenguas milenarias del país. Le aseguro que escuchamos Sueco o Chino antes que Asháninka o Shipibo.

Sería interesante abrir el espacio cultural de su diario a una perspectiva más intercultural, es decir, una visión de cultura que desborde los clásicos discursos \"cultistas\ " o puristas construidos desde occidente. Somos un país que tiene una de las matrices culturales de la humanidad. Con los desarrollos culturales que tiene el país y que poco a poco los vamos valorando después de siglos de extirpación y colonialismo, podríamos ser una de las capitales culturales del mundo globalizado. Es importante tener una voz y un espacio para presentar estas expresiones desde los mismos protagonistas y no solo desde quienes los estudian.

Hoy estas recomendaciones son válidas para todos los medios escritos y audio visuales de circulación nacional y también para los regionales. Es urgente hacer algo para que hayan menos “aldos mariateguis” y más quechuhablantes como Hilaria Supa que no se avergüenzan de su lengua y su cultura y con ello ha alcanzado un respaldo social que justifica con creces su presencia en el Congreso.

martes, 14 de abril de 2009

MAS ALLA DE LA MEMORIA...

Son muchos los acontecimientos que merecen un comentario o por lo menos una opinión.

La reciente condena a Fujimori, la abrumadora cobertura del último atentado en el VRAE, los maquillados informes de la prensa centralista frente al desarrollo regional y porque no incluirlo la extraña y silenciosa desaparición del escenario político de las escandalosas grabaciones del "compañero" León que se trajeron abajo todo un gabinete, muestran porqué lo "real maravilloso" convive en nuestro país con lo "real escandaoloso"

Parece un mix algo confuso, pero entre todos esos hechos hay un elemento común, la incapacidad del gobierno de turno para atender las verdaderas necesidades del país y su ceguera institucional por responder a las demandas de la mayoría para seguir defendiendo a un sector.

Una visión incompleta

Para quienes ven el conflicto armado que vivió el Perú sólo desde sus efectos en Lima y como un acontecimiento del pasado, creyendo que el terrorismo lo derrotó Fujimori debo decirles que viven engañados. Solo basta salir hacia los alrededores de Lima para constatar que los efectos del actual modelo sigue haciendo más grande el abismo entre los que tienen y los que no tienen, entre los que viven de las ventajas del liberalismo y los que sufren mayor exclusión y por ende el gérmen del conflicto armando está ahí latente y captando a jóvenes que ven menos posibilidades para ellos en este modelo.

Esa misma situación ve más radicalmente en zonas como Cora Cora o los poblados del Alto Imaza de la Región Amazonas, por poner dos ejemplos producto de políticas centralistas de dejan a miles de peruanos del interior del país relegados de las oportunidades que tienen quienes migran o quienes tienen un "padrino" con estrella.

¿Una justicia excluyente? una justicia pendiente...

Las recientemente desenterradas víctimas de Putis reclaman la misma justicia que las víctimas de Barrios Altos, ¿no merecen la misma justicia? o por ser quechua hablantes o campesinos ¿no fueron también víctimas de políticas de diferentes gobiernos ajenos a la verdadera problemática social del país?. Estamos totalmente de acuerdo con el resultado del juicio a Fujimori, pero creemos que con el mismo rigor deberia juzgarse a quienes desde su posición de poder no hicieron NADA por atender esta realidad.

Al visitar la muestra fotográfica de Domingo Garibaldi en Ayacucho sobre las víctimas de Putis (de la que se extrae la foto que acompaña esta reflexión), y compartir unos minutos de oración con los comuneros parientes de aquellas victimas solo me queda decir que el Perú sigue fragmentado y la violencia no ha cesado. Al intentar entender los discursos que se dijeron aquella tarde y que fueron en su mayoria en quechua, siento que nosotros también vivimos excluidos de la posibilidad de un acceso a nuestra propia identidad y cultura y peor aun que seguimos sin entendernos.

Es lamentable que bajo el manto de un partido llamado "emblemático" se siga ocultando a tantos estrellados que con la ya comprobada viveza partidaria se mantienen limpios e inmaculados de una herida que sigue sangrando en varias zonas del país.

La muerte en la escena o la ausente presencia del Estado

Es conmovedor el dolor de las familias de los jóvenes que decidieron servir al país y que por la negligencia de las autoridades murieron a manos de cobardes e insensatos narco terroristas. Pero hay un dato que muchos dejan de tomar en cuenta. Estas personas que perpetraron este atentado son fruto de un contexto, de una sociedad, de una educación o de una falta de ella. Me refiero al sistema... todos se echan ahora la culpa frente a la sangre derramada sin embargo hay un claro ausente en este proceso que no quiere salir al frente de estas terribles consecuencias.

Esta misma ausencia se percibe en otros niveles de decisión que tienen que ver con la ejecución de proyectos de inversión publica, la atención a las demandas de los pueblos indígenas y la indiferencia frente a procesos de empoderamiento local y regional. En este escenario no se dan muertes crueles como las del VRAE pero a la larga el costo social y es tan alto como el dolor por la muerte innecesaria de estos jóvenes.